Una de mis anécdotas favoritas sobre enseñar fracciones es el fracaso del “tercio de libra”. La cadena de comida rápida estadounidense A&W, la competencia de McDonald’s, creó una hamburguesa para competir con el famoso “cuarto de libra”, y la vendía al mismo precio. La iniciativa falló porque las personas creían que estaban pagando de más, después de todo, “cuatro” es mayor que “tres”.

No me cabe duda de que la mayoría de las personas han completado ejercicios que demuestran cuánto vale un cuarto, y que es menor a un tercio, durante la escuela primaria. Además, habrán escuchado atentamente mientras el docente explicaba el tema, más de una vez. Sin embargo, así estamos.

¿Qué me dice esta historia como educador de matemáticas?

Que no estamos enseñando bien la materia.

Los costos de enseñar matemáticas con una estrategia vertical

La educación es un sistema esencialmente vertical en casi todos los países del mundo. El gobierno define los objetivos educativos y estándares para cada grado y es tarea de los docentes ayudar a los estudiantes a alcanzarlos.

Precisamente, el enfoque de que un mismo método les servirá a todos los estudiantes es el que deja a varios en el camino, sintiéndose alienados y desconectados de la educación. En ninguna otra materia es tan evidente este proceso como en las matemáticas. Como resultado, los estudiantes de secundaria terminan la escuela sin saber que ⅓ es mayor a ¼.

Podríamos estar enseñando este tema de una mejor manera. La pregunta es “¿cómo?”

El aprendizaje impulsado por el estudiante es el futuro de la educación

La motivación es un factor clave para una buena educación. Cuando los estudiantes se encuentran interesados y con ganas de aprender, es más probable que alcancen los objetivos educativos. Entonces, ¿por qué no construimos la motivación estudiantil y les damos un lugar en el asiento de acompañante?

Precisamente, de eso se trata el aprendizaje impulsado por el estudiante.

Este método de enseñanza revierte el enfoque vertical y pone a los estudiantes a cargo de su propia educación (en la medida de lo posible).

Además, se ha comprobado que la enseñanza enfocada en el estudiante los ayuda a alcanzar resultados académicos superiores, sobre todo en materias TIC, como matemáticas.

Aquí compartimos algunos de los componentes clave en el aprendizaje impulsado por el estudiante, que intentamos integrar en Matific:

Elegir: los estudios demuestran que, cuando un estudiante tiene la oportunidad de elegir, desarrolla una motivación intrínseca y un sentido de eficacia, sin importar el grado en el que se encuentre. En Matific, les ofrecemos muchas opciones a los estudiantes para que puedan elegir sobre qué problemas trabajar y explorar los diferentes tipos de actividades.

Aprendizaje activo: en lugar de ofrecerles a los estudiantes hojas de trabajo que deben completar pasivamente, el aprendizaje impulsado por el estudiante los motiva a descubrir los temas con otra profundidad. Incorporamos esta metodología en nuestras actividades de matemáticas a efectos de ofrecer una experiencia con múltiples respuestas correctas, entre otras cosas.

El docente como recurso: en vez de dictar todo lo que el estudiante debe hacer, el docente se convierte en guía y facilitador. Con Matific, esto se da con naturalidad. Los estudiantes avanzan a su propio ritmo mientras los docentes siguen el progreso. Entonces, cuando el estudiante necesite apoyo en persona o alguna devolución, el docente puede intervenir u ofrecerle ayuda. Otra posibilidad es que el docente sugiera proyectos adicionales para desafiar y desarrollar las habilidades de los estudiantes sobresalientes.

Cuando los estudiantes aprenden, el docente siempre está ahí para ayudarlos. Sin embargo, se da de una manera colaborativa. Tanto docentes como estudiantes son libres de sugerir actividades, ejercicios y proyectos que impulsarán el avance de los estudiantes. En muchas ocasiones, estudiantes y docentes pueden trabajar juntos para descubrir la mejor manera de aprender, que se adapte tanto a los intereses de los estudiantes como a los objetivos educativos del docente.

Relevancia en contextos reales: para interesarse en la materia, el estudiante quiere saber porqué lo que aprenden es importante. Dicho en otras palabras, ¿en qué lo ayudarán estas habilidades matemáticas en el mundo real? Los resultados demuestran que cuando se relaciona el contenido con problemas del mundo real, el compromiso aumenta.

Por este motivo, incorporamos situaciones diarias en Matific siempre que sea posible. A través de historias y problemas de enunciado, traemos las matemáticas a la vida real.

Un marco para el aprendizaje impulsado por el estudiante en un sistema vertical

Sabemos que los docentes operan en un sistema educativo vertical. Cuando con planes de estudios que cumplir y coordinadores a quienes responder. Sin embargo, creemos que ¡ambos mundos pueden convivir! Es posible cumplir con el plan de estudios y adaptarse al aprendizaje impulsado por el estudiante.

El abordaje que acordamos es proveerles a los docentes y estudiantes todo lo que necesitan para tener éxito en el sistema en el que operan, sin perder de vista que el foco de la experiencia está en que los estudiantes aprendan matemáticas en cada momento. Estamos orgullosos de ser una de las únicas plataformas que se toman en serio estos valores. A continuación, compartiremos algunos ejes que tenemos en cuenta al momento de desarrollar el contenido de Matific. Dichos ejes son relevantes para docentes, coordinadores y cualquier persona involucrada en la educación. ¡Siéntase libre de utilizarlos!

• Motivación: ¿Qué quieren los estudiantes? ¿La motivación es interna o externa?
• Comportamiento orientado al objetivo: ¿Qué cosas hace un estudiante como respuesta a la motivación?
• Compromiso atento: ¿Qué hace que un estudiante se conecte de verdad con una materia?
• Perseverancia: ¿Cómo mantiene el estudiante una meta en medio de la adversidad?
• Logros: ¿Cómo se ve el éxito y cómo lo celebramos?

Todo lo que hacemos afecta el progreso de alguna manera. Matific se enorgullece de facilitar el aprendizaje auténtico de matemáticas para cada estudiante.

¿Qué significa esto?

• Construimos motivación intrínseca para descubrir nuevas ideas matemáticas.
• Ayudamos a los estudiantes a alcanzar sus metas.
• Brindamos maneras de que los estudiantes se interesen por las matemáticas y no solo superficialmente,
• Ayudamos a los estudiantes a internalizar el valor de lo que hacen y concentrarse cuando más importa.
• Ayudamos a los estudiantes a sentir la felicidad de emplear una habilidad ya aprendida y tener ganas de conocer más.

Con estos pasos, ofrecemos maneras de trabajar dentro del sistema vertical sin aburrir ni alienar a los estudiantes.

Con el aprendizaje impulsado por el estudiante, los niños pueden desarrollar una comprensión profunda y duradera sobre las matemáticas que les servirán en el futuro. Es posible que los estudiantes terminen la escuela sabiendo fracciones. Si cambiamos el enfoque y escuchamos a nuestros estudiantes, podemos cambiar la cara de la educación.